Poco a poco, grandes marcas como Converse apuestan por la escena musical de Lima y es por eso que el pasado mes de Abril llegó por primera vez a Lima: CONVERSE RUBBER TRACKS.
Bandas como Los Lagartos, Los Mortero, Gomas, entre otras, fueron seleccionadas para grabar en el estudio de Converse, junto al productor venezolano ganador del Grammy, Hector Castillo. Grata fue la suerte de Los Lagartos, quienes fueron elegidos para abrir al plato fuerte que estaba cocinando la marca: la banda indie rock Warpaint.
El anuncio se dio a principios de este mes, se trataba de un show para más de 1,200 personas en un conocido local barranquino y lo que logró mayor expectativa fue que las chicas de Warpaint ofrecerían este concierto totalmente GRATIS. Este gran anuncio hizo que el público seguidor de la banda responda inmediatamente.
La convocatoria para recoger los tickets se dio en 3 reconocidos centros comerciales de la capital durante 5 días. La experiencia del primer día, fue desastrosa y, gracias a los errores, la productora y la marca realizaron una buena coordinación para que los días posteriores se llevara a cabo la entrega con orden y puntualidad. Lo demás ya dependía de cómo uno se organizaba y hacía la cola desde temprano, algunas personas faltando a clases o escapándose del trabajo. Todo era válido para poder disfrutar de esa ansiada noche.
La fecha programada para el concierto fue el martes 18, para la mayoría un día pesado por horarios de trabajo o clases. A pesar de las responsabilidades, ya se podía sentir toda la emoción en las redes sociales al ver fotos de Emily, Theresa, Stella y Jenny paseando por la ciudad. Por fin las 4 bellas de Los Ángeles se encontraban en Lima.
Llegó la esperada noche y para variar llegué tarde, por lo que no pude ver a la banda que abría el concierto: LOS LAGARTOS, los cuales (vale repetirlo) fueron una de las bandas seleccionadas del CONVERSE RUBBER TRACKS; así que me quedé afuera haciendo hora para entrar justo cuando Warpaint suba al escenario.
Afuera de Noise se podía ver de todo: revendedores queriendo sacar –mínimo- 50 soles por cada una de las entradas, jovencitos desesperados por conseguirlas y por otro lado, personas que preguntaban si tenías entrada. Si la respuesta era no, ellos te regalaban la entrada siguiendo la cultura del concierto.
El local estaba repleto, se entregó aproximadamente unas 1500 entradas sin contar prensa y gente que chambeaba en el local, era de esperase el lleno total y así, entre risas y chelas, siendo casi las 10:00 pm, la portada del disco homónimo de la banda aparecía en el escenario.
Los gritos de desenfreno del público nos avisaron que la hora de Warpaint en Lima se estaba aproximando al escenario. El público eufórico gritó a más no poder al verlas salir. El show había empezado.
Más de uno quedó boquiabierto con la belleza de estas 4 chicas que tomaron sus armas de guerra y empezaron a calentar la noche cantando un extracto de una popular canción noventera de CECE PENISTON llamada “Finally”, para luego seguir con “Bees“. Warpaint empezaba a hipnotizar a todo el recinto.
“Undertow” (del canal uterodetitina2)
Mis ojos se pegaron automáticamente a Theresa Wayman que parecía enamorar con su mirada, voz y movimientos a todos los asistentes del concierto. En “Undertow“, Emily Kokal se contagiaba del poder escénico de Wayman cantando a dueto y esparciendo toda su energía al público. De un momento a otro ya se podía escuchar en coro el “What’s the matter? You hurt yourself? Opened your eyes and there was someone else? Now i got you in the undertow…”. Memorable.
Siguieron con “No Way Out” y “Composure“, temas densos y sensuales que hacían que el ánimo aún se siga manteniendo a tope y, al igual que sus presentaciones anteriores, siguieron con 2 temas como para hacernos estallar: “Intro, Keep It Healthy” y la esperadísima “Love Is To Die“.
En “Biggy“, Kokal volvía a tomar el mando del micrófono, la australiana Stella Mozgawa se mostraba apasionada con las baquetas y ya podíamos ver a una tímida pero muy querida Jenny Lee Lindberg más suelta de huesos. Con “I Start Believing” el público empezó a ponerse intenso, especialmente en la parte de adelante, luego de que Kokal bajara del escenario y causara furor en las primeras filas.
Tanta fue la “emoción” del público que se originó una pelea, en la cual hasta la vocalista tuvo que intervenir parando el show y tranquilizando a los acalorados jóvenes que estaban peleando. “¿Vinieron a escuchar música o pelear?” Preguntó Kokal, y el público aplaudía asentando la cabeza. Luego del corte, retomaron el coro y el show siguió con normalidad, pero la tensión aún se sentía en el ambiente y fue disminuyendo gracias a la buena vibra de las chicas y el resto del show.
“Elephants” (del canal uterodetitina2)
Con “Billie Holliday” y “Elephants” terminaban el primer bloque del show. Era imposible que ahí acabara, aún faltaban un par de temas que realmente quería ver en vivo, las chicas venían con más. Así que luego de los clásicos grititos “ WARPAINT!” “ WARPAINT!”, regresó Emily a escena, contándonos que la siguiente canción la había ensayado hace 10 minutos y, para hacernos llorar con una de las canciones que más me gusta de la banda por la letra y la suave melodía que la acompaña, fue inevitable no ponerse sentimental al escuchar “Baby“.
Luego del momento “feeling” de la noche, el resto de la banda se unió para hacernos bailar al ritmo del “Disco//Very“. Ningún alma quedó quieta, las chicas se contorneaban, disfrutaban y nos divertían, la estábamos pasando bien y nos estábamos quedando con ganas de un poco más. El show finalizó con “Krimson“, un tema del EP Exquisite Corpse más lento, como para bajar las revoluciones del tema anterior.
“Disco//Very” (del canal uterodetitina2)
Los sets de Warpaint son habitualmente cortos, así que no me sorprendía que solo fueran 14 temas, pero fue suficiente. Poder femenino, técnica y belleza, un show que dejó a más de uno (y una) enamorado de estas señoritas. Esperemos que regresen pronto, con material nuevo y con la fuerza que las caracteriza. Gracias a Converse y a Nardos Producciones por el esfuerzo, esta banda realmente debía escucharse en Lima y ojalá hayan más shows así, aún estamos a tiempo de mejorar la escena.
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